El trigo es uno de los principales cereales de invierno realizados en la zona semiárida. A continuación, se presenta el análisis económico para la campaña de fina 2019/2020. Se evaluaron cuatro formas de producción en función al nivel tecnológico adoptado en cada caso. Para cada modalidad productiva, se establecieron los costos directos asociados en base a las labores realizadas y los insumos aplicados. Para los mismos se utilizaron valores de referencia a nivel regional a mayo 2019 sin IVA. En el caso de la siembra directa se asume que las labores han sido contratadas, y en el caso de siembra convencional se consideró el uso de maquinaria propia. Posteriormente se efectuó el cálculo del margen bruto por hectárea en base a un umbral de rendimiento esperado, a efectos de poder establecer la variación en el resultado económico en cada caso. Para el cálculo de los resultados económicos se consideró el valor de la tonelada de trigo a enero 2020, informada por el Mercado a Término de Buenos Aires (MATba) el cual es de 162 U$S/ton.
Con respecto a la campaña 2018/2019, el margen bruto por hectárea disminuyó en un 25% en el caso de SD, mientras que para labranza convencional se mantuvo constante. Por otro lado, el rendimiento de indiferencia no se modificó respecto al año anterior.
CONSIDERACIONES FINALES
Si bien el valor del trigo para enero 2020 es inferior a la campaña anterior, su cotización continua siendo levemente superior a la media histórica. Para poder cubrir los costos fijos se precisa obtener un rinde promedio de 1.700 kg/ha. El análisis económico presentado sólo pretende ser una guía respecto de los ingresos en base a la inversión realizada en cada caso. Cabe aclarar que a la hora de evaluar el resultado de la campaña que se inicia, cada establecimiento deberá tener en consideración: el resultado económico a obtener, el aspecto financiero, la disponibilidad de superficie, los objetivos de producción y la mano de obra a disposición.
Fuente: INTA por María Soledad Carrasco y Carmen Corina Cerda