Estas ocasionan graves problemas sanitarios y constituyen un escenario propicio para la multiplicación masiva de muchos de los vectores involucrados en la transmisión de enfermedades, como roedores y mosquitos.
Debido a las intensas lluvias caídas en algunas regiones de nuestro país y a la existencia de zonas anegadas e inundadas, el Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa) recomienda a la población extremar las medidas de prevención para evitar contraer enfermedades que se transmiten de los animales a las personas (zoonosis).
Las inundaciones generan escenarios propicios para la multiplicación vectores involucrados en la transmisión de enfermedades, como roedores y mosquitos. A esto se suman otros factores de riesgo como la falta de agua segura, la mezcla del agua que inunda las viviendas con materiales orgánicos en descomposición, materia fecal y aguas servidas (contaminadas con microorganismos como hongos, bacterias, parásitos y virus), el hacinamiento y las escasas condiciones higiénicas.
Entre las enfermedades que se ven comúnmente favorecidas por estas condiciones climáticas se pueden mencionar: dengue, fiebre amarilla, leptospirosis, chikunguña, leishmaniasis y distintos tipos de parasitosis.
Ante esta situación, se recomienda adoptar las siguientes medidas preventivas:
• Beber siempre agua segura: embotellada comercialmente, hervida al menos durante 3 minutos, o tratada antes de su consumo. El agua de la red domiciliaria también se debe tratar, por eventuales contaminaciones de la red de distribución y de los tanques cisternas.
• Utilizar agua potable o potabilizada para efectuar la limpieza de los utensilios empleados en la preparación y consumo de alimentos.
• No consumir alimentos ni medicamentos que hayan estado en contacto con el agua de la inundación. Desechar los comestibles que hayan perdido la cadena de frío debido a cortes en el suministro eléctrico.
• Lavarse muy bien las manos con jabón y agua potable o potabilizada antes de preparar o comer alimentos, después de ir al baño o de limpiar objetos y superficies que estuvieron en contacto con aguas de la inundación.
• Conservar los alrededores de las casas y los corrales libres de basura y escombros y combatir la presencia de roedores.
• Usar siempre calzado al caminar sobre tierra húmeda, y botas altas en zonas inundadas o al atravesar aguas estancadas.
• Usar guantes si se realizan tareas de desmalezado o cosecha.
• Una vez que bajen las aguas, eliminar aquella que haya quedado estancada.
• Desechar de forma segura los animales muertos y todos los objetos que hayan sido afectados y puedan servir de refugio a roedores, mosquitos y otros insectos.
• Protegerse de las picaduras de insectos vistiendo pantalones y remeras de manga larga, usando repelente sobre la piel expuesta y sobre la ropa (repitiendo la aplicación cada 3 horas), y colocando mosquiteros en puertas y ventanas.
• Vacunar contra la leptospirosis, desparasitar al ganado y a los perros. Consulte a su veterinario respecto al plan más adecuado.
• Ante la ocurrencia de cambios de comportamiento y/o alteraciones en la salud de los animales, consultar inmediatamente al veterinario.
• Si usted o alguno de los miembros de su familia presentan algún signo de enfermedad, consulte inmediatamente a su médico o diríjase al centro de atención de salud más cercano.
Fuente: Prensa Senasa