Tipificación del heno de alfalfa argentino

TIPIFICACIÓN DE HENOS SEGÚN CALIDAD

El Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA) recomienda para la comercialización de henos, tanto en el mercado interno como de exportación, la adopción de la clasificación según su calidad en cinco categorías tipificadas propuestas por el Departamento de Agricultura de EEUU (USDA, 2003). Esta clasificación brinda parámetros útiles para la adecuación del producto a las características generales de la demanda mundial, sin dejar de considerar que cada mercado o cliente en particular puedan solicitar especificaciones diferenciales para el heno que demanden. Se propone la adopción de esta clasificación pero renombrando a las cinco categorías como: 1) Superior (correspondiente a la categoría indicada por USDA como Supreme), 2) Premium (Premium), 3) Primera (Good), 4) Segunda (Fair) y 5) Tercera (Utility).

PARAMETROS QUIMICOS

 

Los parámetros químicos que contribuyen a la clasificación por calidad en las categorías antes mencionadas son: Fibra Detergente Neutro (FDN, %): representa el total de componentes de la pared celular de las plantas (hemicelulosa, celulosa, lignina y sílice). El contenido de FDN está asociado inversamente al potencial de consumo voluntario de ese forraje por parte del animal, es decir, a menor %FDN más podrá consumir, y mayor será su producción. Fibra Detergente Acido (FDA, %): representa la parte indigestible de la pared celular compuesta por lignina, celulosa ligada a la lignina y otros componentes como sílice y cutina. El contenido de FDA está inversamente asociado a la digestibilidad, es decir que a menor %FDA es mayor la proporción del forraje que podrá ser digerida y aprovechada por el animal. Valor Nutritivo Relativo del forraje (VNR): Conocido en inglés como RFV (Relative Feed Value), es una valoración o puntaje de la calidad del forraje que se basa en su digestibilidad y potencial de consumo, estimados a partir del %FDA y %FDN, respectivamente. Se toma como referencia que un VNR=100 corresponde a un heno confeccionado en 100 % flor y que tiene una FDA= 41% y una FDN= 53%. El valor mínimo teórico es cero, y no tiene límite máximo, aunque el rango usual de VNR va desde 70 (alfalfa semillada) a 200 (alfalfa en estado vegetativo a prebotón floral).

 

El VNR se calcula en base a la siguiente ecuación: VNR= [88,9 – (0,779 x %FDA)] x [(120 / %FDN)/1,29] Proteína Bruta (PB, %): la proteína es el principal nutriente que aporta la alfalfa a la dieta animal. El método de medición más utilizado se basa en la estimación de la concentración de nitrógeno total en el forraje. Total de Nutrientes Digestibles (TND, %): calculado en función de la FDA, es un parámetro indicativo de la suma total de nutrientes aprovechables por el animal.

En la Tabla 1 se detallan las cinco categorías de heno con los rangos para cada parámetro químico descripto.

Respecto al Porcentaje de Humedad, el cual no es mencionado en la clasificación, es importante considerar que los henos destinados a exportación no deben superar el 14 % o lo que es igual, tener no menos de 86 % de materia seca.

PARAMETROS ORGANOLEPTICOS

Si bien los atributos químicos cuantificables son el criterio más importante para determinar el valor alimenticio y el precio de mercado, existen otras características que no pueden ser adecuadamente definidas sólo por los análisis químicos. Estos aspectos se definen a partir de una evaluación organoléptica, que es aquella realizada a través de los sentidos de la vista, olfato y tacto:

1) Madurez o estado fenológico: no es fácil de ser estimada en forraje ya enfardado, pero la presencia de botones florales, flores y frutos (vainas) en el heno da una idea del estado de madurez al que fue cortado el cultivo, el cual está altamente correlacionado con el valor nutritivo que aporta la alfalfa.

 

2) Foliosidad: la estimación de la proporción de hojas en el heno es un buen indicador, ya que las hojas son la porción de mayor calidad, conteniendo aproximadamente el 70% de la proteína, el 90% del caroteno y más del 65% de la energía digestible presente en la planta de alfalfa.

3) Indicadores de daño 3.a) Materiales extraños: estima el grado de contaminación con malezas, rastrojos de alfalfa y de otros cultivos, rocas, tierra, y otros materiales con poco o ningún valor como alimento, y eventualmente peligrosos para la salud animal. 3.b) Olor y presencia de hongos: un buen heno de alfalfa no debiera presentar olores desagradables (producto de fermentaciones indeseables) ni desarrollo fúngico visible. Estos parámetros, junto con 2) Foliosidad: la estimación de la proporción de hojas en el heno es un buen indicador, ya que las hojas son la porción de mayor calidad, conteniendo aproximadamente el 70% de la proteína, el 90% del caroteno y más del 65% de la energía digestible presente en la planta de alfalfa. 3) Indicadores de daño 3.a) Materiales extraños: estima el grado de contaminación con malezas, rastrojos de alfalfa y de otros cultivos, rocas, tierra, y otros materiales con poco o ningún valor como alimento, y eventualmente peligrosos para la salud animal. 3.b) Olor y presencia de hongos: un buen heno de alfalfa no debiera presentar olores desagradables (producto de fermentaciones indeseables) ni desarrollo fúngico visible. Estos parámetros, junto con el color, están estrechamente relacionados con la humedad con la que se enfardó y la temperatura alcanzada durante el almacenamiento. Calentamientos por encima de 50 °C, consecuencia de respiración microbiana, son seguramente provocados por un enfardado con excesiva humedad. 3.c) Color: un color verde brillante es un indicador de que el heno fue secado rápido y adecuadamente, sin sufrir daño por lluvias o por exceso de temperatura. El color amarillo indica un exceso de exposición al sol durante el secado, mientras que capas blanquecinas intercaladas con heno verde indican desarrollo fúngico por haber enfardado con exceso de rocío sobre la andana. Henos que alcanzaron temperaturas de 55 °C muestran un color marrón acaramelado, mientras que si la temperatura sobrepasó los 60 °C se verá color marrón oscuro a negro. El color es un parámetro indicativo de calidad, pero no puede ser considerado confiable para estimar la digestibilidad del heno Estos parámetros organolépticos junto con los de tipo químico, permiten clasificar los henos entre las cinco categorías de la tipificación (Tabla 2).

El INTA propone para la Argentina la adopción del presente sistema de tipificación para su utilización en los henos comercializados tanto en el mercado interno como de exportación.

 

Fuente: INTA