Comportamiento de híbridos de maíz de diferente germoplasma a través de la ventana de siembra para el área de riego del río Dulce de Santiago del Estero. I: caracterización del desarrollo

El retraso de la implantación entre septiembre y enero provocó, en promedio, una disminución en la duración en días del período vegetativo. Por el contrario, el período reproductivo se alargó con el retraso en la FS, estando los cambios asociados a la variación en la TM. Como consecuencia de los cambios opuestos en las duraciones de los períodos vegetativos y reproductivos con el retraso en la FS, el ciclo total presentó una variación leve entre FS. Para la duración de la etapa vegetativa los híbridos presentaron un comportamiento TR>TXT>TE, en cambio la duración de la etapa reproductiva presentó un comportamiento TE=TXT>TR.

El área de riego de Santiago del Estero se ubica en la meseta que se extiende hacia ambas márgenes del Río Dulce en esta provincia. El clima de la región es semiárido sub cálido con altas temperaturas, grandes amplitudes térmicas diarias y estacionales, alta evapotranspiración y precipitaciones menores lo que genera un balance hídrico negativo. Utilizando riego, existen condiciones adecuadas para el crecimiento, desarrollo y rendimiento del maíz, el cual puede ser implantado desde el mes de agosto hasta el mes de enero (Romani et al., 2016). Bajo condiciones de riego, la limitante más importante para los cultivos en el norte del país pasa a ser las altas temperaturas, por lo que normalmente se utilizan estrategias de fechas de siembra muy tempranas o muy tardías con el objetivo de evitar que la etapa de floración coincida con altas temperaturas (Maddonni, 2012), ya que las fechas de siembra intermedias (octubre a diciembre) pueden causar disminuciones importantes en la productividad de maíz debido a la incidencia de estrés térmico en el periodo de floración. Para fechas de siembra tardías, donde predominan las altas temperaturas, los híbridos tropicales (TR) son los mejores adaptados por su mayor resistencia (Rattalino y Otegui, 2013), en cambio para fechas de siembra tempranas los más recomendados serían los híbridos templados (TE) por su alto potencial productivo (Romani, 2016). Por otra parte, existen híbridos obtenidos a partir del cruzamiento de germoplasma tropical y templado (TXT) los cuales han demostrado tener un buen comportamiento productivo (Metzler, 2007; Romani, 2016).

 

Si bien, para el área de riego de Santiago del Estero existen estudios para las fechas de siembra extremas, es escasa la información sobre el comportamiento fenológico de cultivares TE, TXT ó TR a través de toda la ventana de siembra entre septiembre y enero, por lo que el presente trabajo tuvo como objetivo generar información al respecto. Acompañan a este trabajo, un segundo en donde se estudiará el comportamiento productivo de los cultivares.

Materiales y métodos.

El experimento se realizó durante la campaña agrícola 2015/2016 en el campo experimental “Francisco Cantos” perteneciente a la EEA INTA Santiago del Estero (28° 03’ LS; 64° 15’ LW; 169 m.s.n.m), Argentina. Se implantaron 5 fechas de siembra (FS): 04 de septiembre (FSS), 09 de octubre (FSO), 10 de noviembre (FSN), 11 de diciembre (FSD) y 12 de enero (FSE). La conducción del experimento se realizó sin limitaciones hídricas y nutricionales para lo cual se aplicaron riegos por manto cada 25 – 30 días durante el ciclo del cultivo, además de una fertilización con 400 kg ha-1 de urea y 100 kg ha-1 de DAP (fosfato di amónico) en el estadio fenológico V3 (Ritchie y Hanway, 1982). El experimento estuvo compuesto por 3 híbridos comerciales de diferente germoplasma (GERM): DK 72-10 VT3P de germoplasma 100% templado (TE), DKB 390 VT3P de germoplasma 100% tropical (TR) y DK 79-10 VT3P de germoplasma 50% tropical por 50% templado (TXT) todos híbridos con buena adaptación para la región (Ing. Agr. Hernán Ingrassia, Technology Development – Corn Monsanto Company comunicación personal). Se utilizó un diseño en bloques completamente aleatorizados con tres repeticiones con arreglo de parcelas divididas, donde la parcela principal fue la fecha de siembra y la sub parcela los diferentes germoplasmas. Cada unidad experimental consistió en 5 surcos distanciados a 0,52 metros de 6 metros de largo.

Durante el desarrollo del cultivo se registró el momento de emergencia (Em), aparición de estigmas del 50% de las plantas (R1) y madurez fisiológica (MF) en el 50% de las plantas del ensayo (R6), utilizando la escala de Ritchie y Hanway (1982) a partir de la observación de 10 plantas contiguas por UE dos veces por semana. Se registraron los datos de temperatura mínima, máxima y media (TM) con la estación meteorológica Weather Monitor II (Davis Instrumennts, CA, USA), ubicada a 500 metros del experimento. Se calculó el tiempo térmico (TT) acumulado en el período vegetativo (Em-R1), reproductivo (R1-MF) y total (Em-MF), utilizando como temperatura base 8°C (Jones y Kiniry, 1986). La duración de los períodos evaluados expresada en días y en TT se evaluó mediante ANOVA. Las medias se compararon utilizando la prueba de la diferencia mínima significativa (LSD, Fischer) con un nivel de significancia del 5%. Todos los análisis se realizaron utilizando el software InfoStat (Di Rienzo et al., 2011).

 Resultados.

Se detectaron diferencias significativas e interacciones para los diferentes periodos tanto en días como en TT (Tabla 1). En cuanto a las interacciones, estas se debieron principalmente a leves cambios en la magnitud de la respuesta de cada híbrido a través de las diferentes épocas de siembra. A medida que se retrasó la implantación, se generó una sostenida y significativa disminución en la duración en días del período vegetativo, lo cual se explica por el incremento de la TM a la que estuvo expuesto el cultivo entre FSS y FSE (Tabla 1). Al analizar la duración del mismo periodo medida en TT no se registraron las mismas tendencias. Así, el TT fue igual en las FSS, FSO y FSD, mientras que contrariamente a lo esperado fue mayor y menor en la FSN y FSE, respectivamente (Tabla 1). Las variaciones registradas en FSN y FSE podrían explicarse en parte por: i) fallas en los modelos de cálculo de TT ante la incidencia de altas temperaturas (períodos del día con temperaturas superiores a la óptima); ii) acortamiento de la etapa en FSE por un menor número de hojas diferenciadas (datos no mostrados) debido probablemente a un acortamiento de la duración de la fase de diferenciación foliar; y iii) efecto de los cambios en el fotoperíodo entre FS. Nuevos estudios deberán ser llevados a cabo para identificar las causas de la variación en la duración del período vegetativo expresado en TT. Tabla 1: Duración promedio en las diferentes fechas de siembra (FS) y germoplasmas (templado –TE-, tropicalxtemplado –TxT- y tropical –TR-) del período vegetativo (emergencia –Em- a floración -R1-), reproductivo (R1 a madurez fisiológica –MF-) y ciclo total (Em – MF) expresado en días y TT y temperatura media de los períodos en cada fecha de siembra (FS).

Al analizar el comportamiento promedio de los GERM, los híbridos se diferenciaron significativamente en cuanto a la duración del periodo vegetativo en orden TR>TXT>TE tanto en días como en TT (Tabla 1), lo que podría explicarse por un mayor número de hojas en TR (datos no mostrados). Esto coincide con lo reportado en otros trabajos donde maíces tropicales registraron ciclos más largos (Fischer y Palmer, 1984; Johnson et al., 1986; Rattalino y Otegui, 2012). El retraso de la FS incrementó sostenidamente la duración en días del periodo reproductivo, alcanzando un incremento máximo de 56% entre FSS y FSE (Tabla 1). Resultados opuestos fueron reportados para zonas templadas, donde la etapa reproductiva no presentó variaciones de importancia entre implantaciones de septiembre y diciembre (Andrade et al., 1996). Al analizarlo en TT, si bien la variación fue menor, sucedió lo mismo salvo en la FSE, donde contrariamente a lo esperado disminuyó significativamente el TT (Tabla 1). La duración del periodo reproductivo medido en días, presentó diferencias significativas entre los tres híbridos quedando los híbridos en el siguiente orden TXT>TE>TR (Tabla 1). Por el contrario, no ocurrió lo mismo al medir la etapa en TT donde TXT=TE>TR (Tabla 1). Cabe destacar que TR presentó una importante disminución en el TT requerido para completar esta etapa al pasar de FSS a FSE (9,4%). Este comportamiento puede ser atribuido a la menor adaptación del cultivar TR a temperaturas moderadamente bajas durante la fase de llenado en la implantación de enero (Paliwal et al., 2001).

La duración del ciclo completo en días presentó una variación máxima entre FSO y FSE de solo el 11%, al analizar las diferencias en TT estas fueron también del 11% (Tabla 1). A medida que se retrasó la época de implantación el acortamiento del periodo vegetativo se compenso con el alargamiento del periodo reproductivo por lo que la duración del ciclo total fue poco afectada presentando valores máximos en las FS extremas (Tabla 1). Los híbridos por su parte presentaron un comportamiento promedio donde TXT y TR normalmente fueron de ciclo similar y significativamente más largo que TE tanto en días como en TT (Tabla 1). El comportamiento de los híbridos TR y TE coincide con reportes de estudios realizados anteriormente en el mismo campo experimental (Romani, 2016). El híbrido TXT, en cambio, presentó un comportamiento similar a TR en cuanto a la duración total del ciclo lo cual es opuesto a reportes anteriores (Romani, 2016). Sin embargo, debe destacarse que TXT acortó la duración de la fase vegetativa e incremento la duración de la fase reproductiva con respecto a TR hecho que si coincide con resultados anteriores (Romani, 2016).

Conclusiones.

El retraso de la implantación entre septiembre y enero provocó, en promedio, una disminución en la duración en días del período vegetativo. Por el contrario, el período reproductivo se alargó con el retraso en la FS, estando los cambios asociados a la variación en la TM. Como consecuencia de los cambios opuestos en las duraciones de los períodos vegetativos y reproductivos con el retraso en la FS, el ciclo total presentó una variación leve entre FS. Para la duración de la etapa vegetativa los híbridos presentaron un comportamiento TR>TXT>TE, en cambio la duración de la etapa reproductiva presentó un comportamiento TE=TXT>TR

 

Fuente: INTA por Matías Rafael Romani, Salvador Prieto Angueira, Ana Sandes, Ruella M.R.