El uso de las pasturas son periódicamente defoliadas, por lo general, por los animales en pastoreo, aunque también lo pueden ser por cortes. La capacidad de la planta de recuperar su forma y tamaño después del corte o pastoreo, como cuando reinician el crecimiento después del reposo estacional o, en algunos casos, de su destrucción por el fuego, se denomina rebrote. El efecto de este crecimiento posterior a la remoción de parte de los tejidos de la planta es de suma importancia en la explotación ganadera. Durante la estación de desarrollo de los pastos, cuando rebrotan mediante la emergencia continuamente de los macollos, creciendo y muriendo a velocidades que dependen esencialmente de las especies, de las condiciones ambientales y del estado de desarrollo. Es por ello que en las plantas perennes se encuentran al mismo tiempo macollos en crecimiento y desarrollo, yemas axilares en actividad y dormidas y macollos cuyos tallos se encuentran elongando hasta la etapa de floración. Es por esto que las plantas forrajeras cumplen un rol principal en la nutrición animal. Es necesario conocer con profundidad los cambios fisiológicos que rigen la producción de biomasa en los ecosistemas, para desarrollar técnicas de manejo que aseguren la productividad y permanencia de las pasturas y los mejores performance animal.
OBJETIVO
El objetivo fue evaluar el macollamiento en los estolones en dos cultivares Chloris gayana cv. Callide y cv. Fine Cut, bajo dos frecuencias de defoliación por cortes.
MATERIALES Y MÉTODOS
La experiencia se realizó a campo, en la E.E.A. del INTA de Colonia Benítez (Chaco), sobre una pastura bien establecida, y a su vez se realizó la misma evaluación, en el invernáculo del Laboratorio de Química de la Facultad de Ciencias Agrarias (UNNE), utilizando matas de los distintos cultivares de Grama de la pastura de la experiencia a campo, trasplantadas en macetas de 4 kg. En el invernáculo, la unidad de muestreos fueron plantas en macetas, 16 del cv. Fine Cut y 16 del cv. Callide, de las cuales 8 de cada cultivar fueron sometidas a cortes cada 15 días (T0 ) y las restantes cada 30 días (T1 ). En las pasturas de la EEA, también se evaluó las 2 frecuencias de corte y con los mismos cultivares con 4 repeticiones. El tamaño de las parcelas fue de 2x3m y la unidad de muestreo fueron plantas elegidas al azar en las cuatro repeticiones. La cantidad de macollos en cada estolón de la planta, primera generación, fueron marcados con hilos de lana de un color determinado, la aparición de nuevos macollos se marcó con un color diferente a los de la primera generación, a los fines de realizar el seguimiento de las distintas generaciones.Con los datos obtenidos se realizó un Análisis de Varianza y comparación de medias a través de test de Tukey (p<0,05).
RESULTADOS
En el invernáculo se pudo observar el inició de la producción de macollos por estolones en febrero para ambos cultivares y en ambas frecuencias de corte, sin embargo en el campo, las plantas de ambos cultivares comenzaron a emitir estolones a mediados de marzo, y solamente en la frecuencia T1 . En T0 no fueron detectados nuevos macollos por estolones, para ningún cultivar. Esta situación de mayor macollamiento por estolón que presentó en él invernáculo, se debería a la mayor disponibilidad de espacio para la emisión de estolones y mejor establecimiento de la planta, cuando ellas se encontraban solas en las macetas. Sin embargo, no se observo emisión de estolones bajo el tratamiento T0 en las plantas instaladas en campo, esto probablemente se deba a que la plantas priorizaron la recuperación del área foliar y dejaron en segundo plano, el avance por nuevas estructura de anclaje. En el tratamiento T1 se observo producción de estolones, aunque en menor medida que el observado bajo invernáculo. Esto se debería a la mayor densidad de plantas y la competencia intraespecífica provocando un limitado avance de las pasturas, por la menor producción de estolones.
CONCLUSIÓN
En la frecuencia de corte a 30 días incrementa la producción de estolones y por lo tanto favorece el establecimiento y colonización del cultivar.
Fuente: INTA por Sofía Cano Alfañar, Flora Elizabet Céspedes Flores, Juárez R.S. , López M.A.