Tucumán cuenta con 199.377 ha de soja cultivada

El laboratorio de Sistema de Información Territorial del INTA Famaillá determinó que la superficie total implantada con el cultivo en Tucumán durante la campaña 2017-2018 es de 199.377 hectáreas, a partir del procesamiento de imágenes satelitales con metodologías de teledetección y análisis de Sistemas de Información Geográfica (SIG).

 

El departamento con mayor superficie del cultivo es Burruyacú con 74.008 ha, ocupando el 37% del total provincial. Le siguen Cruz Alta con 32.525 ha y Leales con 31.599 ha rondando, en ambos casos, el 16% de la superficie de Tucumán. La Cocha, con un 15%, tiene 29.407 ha. Mientras, Graneros ocupa un 11% con 22.603 ha. Los departamentos con menor superficie son Simoca con 3.973 ha, J. B. Alberdi con 1.963 ha, Lules con 1.388 ha, Famaillá con 1.063 ha, Chicligasta con 375 ha, Rio Chico con 304 ha y Monteros con 169 ha.

De acuerdo a la Sección de Agrometeorología de la EEA Famaillá, la campaña 2017-2018 tuvo un comportamiento agrometeorológico cálido y húmedo en términos generales. A comienzos de noviembre del 2017, el perfil del suelo se encontraba con humedad edáfica y profundidad de napa normal y suficiente para comenzar la siembra, consecuencia de los 75 mm de precipitación ocurridos en la primera decena del mes. Sin embargo, en muchas zonas de la provincia, se esperaron las precipitaciones de diciembre para garantizar mayor humedad en el suelo. Ese mes alcanzó los valores normales de precipitación, aunque la distribución temporal pudo afectar la planificación de las labores debido a que el 60% de la lluvia mensual se concentró en la última decena de diciembre. Enero del 2018 cerró con una precipitación superior a la normal, pero este volumen hídrico difícilmente pudo ser aprovechado por las raíces, ya que ocurrió en tres eventos que superaron los 70 mm/día, provocando daño en los suelos por escorrentía y erosión. Febrero, marzo y abril de 2018 se destacaron por los bajos volúmenes de precipitación alcanzados, la disminución de la humedad edáfica y el aumento de profundidad de la napa freática. Las pérdidas de agua del sistema estimado por la evapotranspiración alcanzaron valores muy superiores a los normales en febrero, superiores en marzo y normales en abril. En toda la campaña agrícola se destacó la gran amplitud térmica e inestabilidad del aire.

 

Las imágenes satelitales procesadas para este estudio fueron provistas por la Comisión Nacional de Actividades Espaciales de Argentina (CONAE) y la Agencia Espacial Europea (ESA). La toma de datos fue realizada por sensores a bordo de las plataformas satelitales LANDSAT 8 (NASA – Resolución espacial 30 y 15 metros) correspondientes al 16 de febrero, 4 de marzo y 5 de abril de 2018; y por SENTINEL 2A (ESA – Resolución espacial 10 y 20 m), adquiridas el 22 y 30 de marzo de 2018. Las imágenes se re-proyectaron a “Transverse Mercator”, datum “WGS 84”.

Se realizaron análisis multitemporales aplicando metodologías de análisis visual, digitalización de parcelas y análisis digital (clasificación no supervisada), complementadas con conocimientos a campo de técnicos de las agencias de extensión rural de INTA. El software empleado para el procesamiento de imágenes satelitales fue el ERDAS Imagine 9.x. Se utilizó, además, el software libre QGIS versión 2.18 para el análisis de datos georreferenciados y la elaboración de cartografía.

Fuente: Prensa INTA Famailla