Tras haber superado su máximo histórico, el dólar sigue en alza. En las primeras operaciones de hoy, la divisa estadounidense continuó subiendo y superó por primera vez en la mañana los $22 en el mercado minorista, pero al cierre de la jornada se disparó aún más y alcanzó los $22,99 en el promedio de entidades financieras que hace el Banco Central. Eso implica una depreciación de 6,8% en un sólo día, ya que se encareció $1,47.
El valor minorista en algunos bancos, sin embargo, estuvo muy por encima del promedio. En el caso del Nación, alcanzó los $23,30.
En el mercado mayorista se mantuvo la presión de la demanda que empuja el tipo de cambio. Luego del cierre de ayer en $21,19, influenciado a la baja por una intervención del Banco Central en los últimos minutos de la rueda, alcanzó los $23. Se trata de una depreciación de 8,6%.
El salto de último momento en el dólar mayorista se debió a una operación de compra estimada en US$500 millones. Fuentes al tanto de la operación cambiaria sostienen que posiblemente esa maniobra no se notará en las pantallas al público hoy, pero sí a partir de la apertura de mañana.
“El BCRA sigue con su intervención errática. Hoy vendió en $21,50 pero no lo pudo detener y luego lo dejó ir”, explican fuentes que siguen de cerca la evolución del mercado financiero. “Es una política errática y no resulta efectiva porque no logra parar la depreciación. El mercado no entiende al BCRA”, añaden.
Ayer, el tipo de cambio minorista saltó 64 centavos y alcanzó el máximo histórico de $21,52, mientras el BCRA puso en marcha una nueva estrategia que consistió en convalidar parte de la devaluación del peso pero, a la vez, tratar de administrarla para que no haya saltos abruptos.
Aún así el peso cerró la jornada cayendo más de 3% contra el dólar, lo que lo llevó a posicionarse como la moneda más depreciada del mundo en la jornada y en lo que va de la semana.
Algunos analistas, frente a la dinámica que tomó la “corrida contra el peso” sugieren que el BCRA, que ya había probado calmar al mercado subiendo las tasas, deje escapar algo más el billete para luego doblegarlo y hacerlo caer fuerte aunque tenga que utilizar para ello una gran cantidad de reservas.
“Debería dejarlo correr, esperar que pase esta salida de Lebac a dólar (y después) darle un mazazo en unos días”, aconsejó por caso el economista y ex funcionario Miguel Kiguel en declaraciones a Radio Nacional. Incluso sugirió hacerlo “cuando se reacomoden las posiciones de los inversores: ahí debería salir, bajarlo de vuelta y que el que compra dólares en estos días termine perdiendo”.