En una semana de subas generales para los precios de los granos en la Bolsa de Chicago, se destacaron las mejoras en las cotizaciones del poroto y de la harina de soja, impulsadas por el clima seco en la Argentina y por la previsión de una menor cosecha y de menores ventas externas del subproducto de la molienda. Con sus particularidades, el maíz y el trigo acompañaron el movimiento alcista. En el mercado doméstico, la corta semana dejó subas para la soja y estabilidad para los cereales.
SOJA
La corta semana de negocios fue positiva para la soja en el mercado doméstico, en sintonía con las subas externas, que estuvieron fundamentadas en la falta de humedad que padecen los cultivos argentinos. Con el movimiento concentrado en el Gran Rosario, las ofertas de los compradores crecieron de 5700 a 5900 pesos por tonelada, con algunos pesos más según el volumen comprometido por el vendedor en la última rueda del segmento.
Para el viernes el FAS teórico de la soja fue calculado por el Ministerio de Agroindustria de la Nación (Minagro) en $ 6002, mientras que para el lunes fue fijado en 6047 pesos por tonelada. En el cierre del segmento comercial, la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR) relevó el FAS teórico de la soja para la industria aceitera en 5979 pesos por tonelada.
La tónica alcista también comprendió a la soja de la próxima cosecha, dado que los compradores elevaron de 276 a 290 dólares por tonelada la oferta por la mercadería para las entregas en mayo. Por el grano con descarga durante la primera quincena de marzo se ofrecieron 300 dólares por tonelada. Igualmente positivo fue el cierre en el Mercado a Término de Buenos Aires (Matba), donde los ajustes de las posiciones mayo y julio treparon de 278 a 291,60 y de 283,80 a 297,50 dólares por tonelada.
En su informe sobre carga de buques programada, la BCR indicó que entre el 14 de febrero y el 22 de marzo deben salir desde las terminales del Gran Rosario 135.500 toneladas de poroto de soja, 832.810 toneladas de harina y 125.500 toneladas de aceite; desde Bahía Blanca, 18.000 toneladas de harina y 3800 toneladas de aceite, y desde otros puertos, 75.000 toneladas de harina.
Acerca de los cultivos, el jueves la Bolsa de Cereales de Buenos Aires (BCBA) ponderó elestado de los cultivos del siguiente modo: 18,4% malo; 37,6% regular; 33% normal, y 11% bueno. En cuanto al momento fenológico, dijo que el 25% está vegetando; el 29% floreciendo; el 26% diferenciando vainas, y el 20% llenando granos. Y respecto de la condición hídrica, detalló que en el 51,9% de las zonas es regular; en un 22,6%, adecuada; en otro 22,6%, sequía, y que en apenas el 2,9% es óptima. Con ese panorama, mantuvo su proyección de producción en 50 millones de toneladas.
“Las lluvias registradas durante los días previos sólo brindaron alivio momentáneo en sectores puntuales del centro y del sur de la región agrícola. Gran parte de ambas regiones aún mantienen una condición hídrica deficitaria que afecta el desarrollo del cultivo y su potencial de rinde a cosecha. Luego del paso del frente de tormenta se registró un marcado descenso de temperatura que restó presión a la falta de humedad en suelos, pero que provocó la ocurrencia de heladas en sectores puntuales de Buenos Aires, San Luis y del sur de Córdoba. No obstante, el impacto de estos bajos registros térmicos sobre el cultivo es sustancialmente inferior al efecto negativo del déficit hídrico generalizado”, detalló la entidad. Y anticipó que, según el informe climático, “durante los próximos días se podrían registrar lluvias de moderada intensidad, con entre 10 y 20 milímetros sobre el centro y el sur de la región pampeana, con algunos focos de valores más abundantes, de más de 25 milímetros”.
Muy positivo resultó el balance de la semana para los precios de la soja en la Bolsa de Chicago, dado que las posiciones marzo y mayo aumentaron un 3,92 y un 3,93%, al pasar de 361,19 a 375,34 y de 365,05 a 379,38 dólares por tonelada. Mejor aún fue al saldo para la harina de soja, cuyo contrato marzo trepó un 8,58%, al variar de 378,97 a 411,49 dólares por tonelada. El motivo central de estas mejoras fue el clima seco en la Argentina, que tras cada día que pasa sin lluvias invita a los especuladores a reformular sus proyecciones para la cosecha, con un rango que ya se instalo entre 45 y 50 millones de toneladas.
En el caso de la harina las subas se potencian por ser la Argentina el principal abastecedor global. Ahí apuntan los operadores estadounidenses sus mayores expectativas en poder usufructuar la potencial menor oferta argentina y a posicionarse en un mercado en el que hoy aparece como tercer proveedor.
Está claro que hoy la preocupación para los productores argentinos está en sus cultivosy en un clima que se mantiene esquivo. Pero no habría que perder de vista un análisis algo más profundo de lo que ocurre en el mercado y preguntarse por un momento si los fundamentos son tan alcistas como los presentó esta semana la plaza externa.
A la previsión de una cosecha menor en la Argentina resultaría prudente sumar los 9,95 millones de toneladas que según el Minagro quedaron como stock final de la campaña 2016/2017. Además, si bien la recolección brasileña tiene algunos puntos de demorarespecto del promedio, pocos estimadores ubican sus números de cosecha debajo de los 112 millones de toneladas. A todo esto, añadimos que según el USDA las existencias finales de los Estados Unidos serán de 14,42 millones de toneladas, es decir, un 75,64% superiores a los 8,21 millones del ciclo precedente. Al lado alcista del mercado podemos agregar la especulación con la falta de humedad que hoy evidencia parte del Medio Oeste. Y con toda esta batería de datos, cada uno podrá sacar sus propias conclusiones y tomar recaudos para evitar sorpresas.
Pese a ubicarse dentro de las expectativas, volvió a ser decepcionante el reporte semanal sobre las exportaciones estadounidenses, dado que el jueves el USDA relevó ventas por 640.400 toneladas de poroto de soja, por debajo de las 743.200 toneladas del segmento anterior y dentro del rango previsto por los operadores, de 450.000 a 750.000 toneladas. Las ventas de harina fueron calculadas en 210.000 toneladas, por encima de las 160.800 toneladas del trabajo precedente y dentro de un rango calculado entre 150.000 y 450.000 toneladas. Además, el organismo confirmo negocios por 197.100 toneladas de soja del ciclo 2018/2019.
El viernes, AgRural relevó el avance de la cosecha de soja de Brasil sobre el 17% del áreaapta, por debajo del 19% promedio de los últimos cinco años y del 26% vigente un año atrás. La firma destacó que en la última semana las labores progresaron del 30 al 45% en Mato Grosso, el principal Estado productor de soja brasileña.
MAÍZ
Casi sin variantes cerró la semana para los precios del maíz argentino, dado que las ofertas de los compradores se mantuvieron en 3200 pesos por tonelada para el Gran Rosario y para Bahía Blanca, mientras que para Necochea la propuesta creció de 3150 a 3200 pesos por tonelada. Para el viernes el FAS teórico del maíz fue calculado por el Minagro en $ 3211, mientras que para el lunes fue fijado en 3227 pesos por tonelada. La actividad de los consumos se vio muy afectada por la medida de protesta de los transportistas, las principales propuestas relevadas por la BCBA por maíz seco se ubicaron entre 3100 y 3300 pesos por tonelada.
También se mantuvo estable, en 160 dólares por tonelada, la oferta por el maíz con entrega entre marzo y mayo en el Gran Rosario. En el Matba el saldo fue alcista para el maíz, dado que las posiciones abril y julio subieron de 160,20 a 163,10 y de 155 a 158 dólares por tonelada.
En su informe sobre carga de buques programada, la BCR indicó que entre el 14 de febrero y el 23 de marzo deben salir desde las terminales del Gran Rosario 1.077.292 toneladas de maíz; desde Bahía Blanca, 302.956 toneladas; desde Necochea, 41.948 toneladas, y desde otros puertos, 19.000 toneladas.
Respecto de los cultivos, el jueves la BCBA relevó el avance de la cosecha de maíz para grano comercial sobre el 1,1% de los 5,4 millones de hectáreas sembrados, “con rindes que se encuentran por debajo de las expectativas iniciales”, y mantuvo su previsión ara el cierre del ciclo en 39 millones de toneladas. En cuanto al estado de las plantas, le entidad ponderó un 24,3% malo; un 33,3% regular; un 28,1% normal, y un 14,3% bueno. “Desde nuestro informe previo la cosecha se dio de manera pausada en el centro del área agrícola nacional. Las labores se concentraron en las zonas centro-norte de Santa Fe y en el centro-este de Entre Ríos, con rendimientos que se mantienen por debajo del promediode las últimas campañas, producto de la restricción hídrica sufrida durante floración. En paralelo los lotes tardíos y de segunda ocupación sobre Buenos Aires, Córdoba, Santa Fe y sobre Entre Ríos transitan estadios fenológicos entre diferenciación de hojas y panojamiento bajo reservas hídricas irregulares”.
Con saldo alcista cerró la semana de negocios para el maíz en la Bolsa de Chicago, dondelos contratos marzo y mayo sumaron un 1,52 y un 1,42%, al pasar de 142,51 a 144,68 y de 145,56 a 147,63 dólares por tonelada. Durante el segmento, el cereal se vio beneficiado por la firmeza del trigo; por el repunte del valor del petróleo, y por las menores cosechas previstas en la Argentina y en Brasil, que descomprimirán la competencia en el mercado de exportación, una noticia fundamental para el mercado estadounidense, que debe seguir achicando las existencias finales de la campaña 2017/2018.
En vistas al inicio de la campaña 2018/2019, los operadores ya comenzaron a incluir en sus análisis la situación de los suelos agrícolas del Medio Oeste y los datos que brinda el Centro Nacional de Mitigación de la Sequía no son los más alentadores desde el punto de vista agronómico. Según el mapa de monitoreo de la sequía al 15 del actual, un 33,12% de los suelos del núcleo cereales estadounidense presenta déficit de humedad, contra el 15,31% vigente un año atrás. Además, hay un 14,42% de suelos con condiciones de sequía moderada y un 4,05% con sequía severa. Missouri es el Estado que presenta la peor condición, con déficit en el 98,55% de sus suelos; con un 63,22% de tierras con sequía moderada; un 26,02% con sequía severa, y un 5,59% con sequía extrema.
En línea con lo señalado anteriormente, en cuanto a la necesidad de reducir las existencias, resultó positivo para el mercado el reporte semanal sobre las exportacionesestadounidenses. En efecto, el jueves el USDA relevó ventas por 1.974.400 toneladas de maíz, por encima de las 1.769.600 toneladas del informe precedente y del rango previsto por los operadores, de 1 a 1,5 millones de toneladas. Además, el organismo confirmó operaciones con 97.500 toneladas de grano 2018/2019.
TRIGO
En el mercado doméstico de trigo la oferta por la mercadería disponible se mantuvo estable para el Gran Rosario, en 3500 pesos por tonelada. Para Bahía Blanca y para Necochea, la transición de las propuestas de los exportadores fue de 3500 pesos a 180 dólares, que en la última rueda del segmento fueron equivalentes a 3538,80 pesos por tonelada. Para el viernes el FAS teórico del trigo fue calculado por el Minagro en $ 3419, mientras que para el lunes fue fijado en 3437 pesos por tonelada. El rango de propuestas de los molinos, relevado a diario por la BCBA, creció de 3250/4100 a 3300/4100 pesos por tonelada, según calidad, procedencia y forma de pago.
Fue alcista el saldo de la semana en el Matba, donde los ajustes de los contratos marzo y julio crecieron de 182 a 185,50 y de 185 a 189 dólares por tonelada.
En su informe sobre carga de buques programada, la BCR indicó que entre el 14 de febrero y el 22 de marzo deben salir desde las terminales del Gran Rosario 606.000 toneladas de trigo; desde Bahía Blanca, 203.290 toneladas, y desde Necochea, 41.120 toneladas. Al 15 del actual, el Minagro relevó Declaraciones Juradas de Ventas Externas de trigo 2017/2018 por 6.793.751 toneladas.
Fue alcista el balance de la semana para los precios del trigo de los Estados Unidos. En efecto, las posiciones marzo y mayo de cereal en la Bolsa de Chicago subieron un 1,95 y un 2,28%, al pasar de 164,98 a 168,20 y de 169,39 a 173,25 dólares por tonelada. En Kansas, los mismos contratos ganaron un 2,79 y un 2,71%, tras variar de 171,04 a 175,82 y de 176,55 a 181,33 dólares por tonelada. La devaluación del dólar y la preocupación por el mayoritario mal estado del combo suelos/cultivos fueron los principales fundamentos positivos para las cotizaciones del grano fino.
A casi dos meses del inicio de la cosecha de los trigos de invierno, Kansas, el principal Estado productor del grano fino, tiene el 99,89% de sus suelos con déficit de humedad; un 61,05% bajo condiciones de sequía moderada; un 36,34% de sequía severa, y un 9,50% de sequía extrema, según el último mapa de monitoreo de la sequía del Centro Nacional de Mitigación de la Sequía.
En línea con la percepción del mercado, sobre el estado de los cultivos, el viernes la consultora Informa Economics redujo de 35,16 a 33,50 millones de toneladas su proyección sobre el volumen de la cosecha de trigos de invierno, y de 33,15 a 32,08 quintales por hectárea el rendimiento promedio estadounidense.
Entre neutral a levemente bajista resultó el reporte semanal sobre las exportaciones semanales de los Estados Unidos, dado que el jueves el USDA relevó ventas de trigo 2017/2018 por 311.100 toneladas, por debajo de las 393.400 toneladas del segmento anterior, pero dentro del rango previsto por el mercado, de 200.000 a 450.000 toneladas. Además, el organismo confirmó negocios por 110.800 toneladas de grano del ciclo 2018/2019.