Se esperan mejores resultados agrícolas que en 2017

Granos en alza

La “micro” del negocio agrícola 2018/2019 pinta bien, pero hay menos claridad en el contexto “macro”. Si se comparan los precios a cosecha de los distintos granos al 15 de junio de 2018 se ve un aumento respecto del mismo momento de 2017. Según el consultor Teo Zorraquín, el trigo en enero se cotizaba a US$184,5 por tonelada vs. US$164 del año anterior (+12,5%); el maíz de abril, a US$167 vs. US$155 (+7,7%), y la soja de mayo, a US$270,2 vs. US$247 (+13%). El nuevo ciclo presenta, además, un aumento del tipo de cambio superior al 70%, que se combina con la suba de los precios agrícolas. No obstante, es conveniente recordar que hasta no concretar valores de venta de los granos todo es un espejismo, dado que aquellos pueden bajar. La recomendación de Zorraquín es tratar de tomar estos precios en proporciones altas con distintas herramientas. Pueden ser forwards, futuros u opciones, pero tratando de comprometer la menor cantidad de mercadería. Esto se puede lograr con más posiciones en mercados de futuros y menos en contratos forward. El problema radica en que hacer este posicionamiento en mercados a término requiere cierta capacidad financiera.

Macro compleja

Más allá de los cálculos “micro”, los empresarios agropecuarios están tratando de entender cómo es la nueva macroeconomía que surgió tras los últimos movimientos cambiarios, para adaptar sus decisiones a ella. Según observa Zorraquín, en general, el sector está haciendo lo que suele hacer: volver a apostar, con racionalidad y precaución, pero enterrando nuevamente en el campo su capital y su ilusión. Mientras tanto, mira de reojo a una parte de la clase política y gremial ocupada en defender intereses poco claros, que proponen cambiar para que nada cambie.

De cara a la campaña agrícola, los empresarios estiman costos dolarizados y pesificados en suba y conflictividad gremial que complicará el comercio y los traslados de mercadería en algunos momentos. “Hay preocupación por posibles paros que dificulten mover mercadería, ya sea en la venta de granos, hacienda o leche, como también trasladar insumos para la siembra de granos finos y para preparar barbechos para la gruesa”, observa el asesor. Por esa razón, se adelantan algunos envíos de granos 2017/2018 a destino con precio a fijar, para evitar dificultades a la hora de venderlos y generar caja.

Financiamiento

También se acopian algunos insumos para el ciclo 2018/2019, para evitar demoras en su aplicación, aunque no siempre hay lugar en los campos para guardarlos con seguridad, sobre todo en tierras alquiladas sin mejoras.

El financiamiento es un problema complejo en la campaña en curso. El actual es un momento “áspero” para pedir crédito bancario, según Zorraquín. Las tasas de los préstamos en pesos siguen altas (30 a 40% anual o más) y las tasas en dólares están en el orden del 4% anual.

Para compra de bienes de capital hay líneas en dólares al 4% anual y plazos de 48 meses, y también tasa en pesos a Badlar más 4 puntos (hoy da un 31%) a 7 años en bancos oficiales, con hipoteca.

Para el comercio hay muchas dificultades para descontar cheques posdatados. “Es momento de esperar un poco, para los que pueden hacerlo, confiando que las nuevas medidas y las señales políticas traigan un poco más de normalidad”, aconseja el analista. En materia de arrendamientos ya se han cerrado numerosos acuerdos, con valores similares a los del año pasado y con demanda interesada en desarrollar siembras de cereales, además de los clásicos de soja de primera.

Fuente: La Nación | Por: Carlos Marin Moreno